LEALTAD INCONDICIONAL POR AFECTO
¿Cómo podemos explicar que tantos millones de personas en todo el mundo, muchos de ellos analfabetos y de condición humilde, tengan un perro que les acompaña en todo momento o que les vigila sus bienes o que cuida de sus hijos? Las respuestas pueden ser muy variadas dependiendo de quien las dé, pero después de tantos años de experiencia sabemos que hay que buscarla en lo que siempre se ha dicho sobre el perro, que es el 'mejor amigo del hombre'.
Su lealtad incondicional por afecto le convierte en ese animal tan especial que tanto desean los niños, porque entre ellos no existen las mentiras ni las hipocresías, al igual que no existe entre un perro y su dueño adulto si se da esa unión que la hace inquebrantable.
Sabemos también que el dueño o amo de un perro no es la persona que le da la comida o juega con ellos, sino aquella que sabe ganarse el RESPETO del animal, y a quien el perro atribuye la categoría de GUÍA al que sigue pase lo que pase.
El perro no necesita golosinas para seguir a su amo, de ello dan buena muestra las miles de historias de todas las épocas en la que se cuentan las peripecias de un perro para con su dueño y en las que se demuestra que aun siendo el amo cruel con el animal, el perro lo sigue por esa lealtad incondicional. Es verdad que esa unión puede darse también con otros animales como los caballos, por ejemplo, pero en el caso del perro, es más acusada.
¿Cómo se consigue esta lealtad? Para empezar puede decirse que la propia y simple convivencia entre perro y amo crea esta unión, siempre y cuando exista un mutuo respecto y afecto, independientemente de quien alimenta o asea al perro. Cuanta más próxima de los sentimientos naturales y francos esté una persona más fácil será la convivencia con su perro y más fuerte su unión. Lo que ocurre es que muchas veces en la sociedad occidental actual las personas pierden de vista esos sentimientos naturales y sinceros y se dejan llevar por comentarios infundados que oyen, por modas pasajeras, por falsas creencias, por antropomorfismo hacia los perros, por proteccionismo excesivo o por malacrianza... y la unión se debilita y surgen los problemas entre persona y animal.
En la mayoría de los casos, sólo se trata de hacer comprender al dueño que debe volver la vista hacia la naturalidad para establecer ese lazo vitalicio con su perro; se trata de enseñarle una serie de pautas para fortalecer esa unión y restablecer la comunicación con su perro por lealtad y afecto...
Saber conquistar el 'corazón' de un perro y sentir que está a tu lado siempre es una de las sensaciones inolvidables que convierten a la unión entre una persona y un animal en una experiencia inestimable, única y especial.
EL PERRO QUIERE QUE EL AMO ESTÉ CONTENTO Y ESTO ES LO QUE LE MOTIVA A TRABAJAR. ÉSTE ES SU OBJETIVO FUNDAMENTAL Y SE CONFORMA CON UNA PALMADA EN LA CABEZA O UN HALAGO, PERO SI NO EXISTEN, NO SE DESANIMA. ÉSTA ES SU GRANDEZA.
